Tamaulipas
Este domingo, 332 candidatos al Poder Judicial en Tamaulipas inician su fase de campaña en busca de 147 cargos de magistrados y jueces estatales. Este proceso es histórico, ya que por primera vez, los ciudadanos de la entidad decidirán, mediante el voto, la renovación de este poder público.
En total, los cargos en disputa incluyen: 10 magistraturas del Pleno, una supernumeraria, cinco del Tribunal de Disciplina Judicial, tres regionales, así como 106 juzgados de Primera Instancia, un juzgado de Ejecución de Medidas para Adolescentes, uno del Tribunal Electrónico en Materia Judicial y 20 juzgados menores.
Hasta el momento, se han recibido 24 renuncias, 20 de ellas totales y cuatro parciales. El Instituto Electoral de Tamaulipas (Ietam) reporta que de estas dimisiones, tres corresponden a magistraturas y 21 a juzgados de primera instancia y menores. De los renunciantes, 16 son hombres y ocho mujeres, siendo las ciudades de Reynosa y Río Bravo las más afectadas, especialmente en el ámbito de los juzgados penales.
El listado oficial de los 105 jueces en funciones que se postulan, junto con los demás contendientes, está listo. A partir de este domingo, todos los candidatos podrán comenzar sus actividades de campaña, las cuales concluirán a la medianoche del miércoles 28 de mayo.
El presidente del Ietam, Juan José Ramos Charre, destacó que el principal reto de esta elección no será el presupuesto ni la seguridad, sino la participación ciudadana. En vísperas del arranque de las campañas, subrayó que es crucial despertar el interés de la sociedad, ya que nunca antes se había definido, mediante el voto popular, a quienes ocuparán los cargos judiciales a nivel federal o local.
Ramos Charre explicó que los candidatos en esta elección no son políticos tradicionales, lo que representa una diferencia significativa respecto a otras elecciones, como las de ayuntamientos, diputaciones o presidencias. “No se trata de personas que resolverán directamente cuestiones cotidianas como el alumbrado público o el transporte. La mayoría de los ciudadanos solo piensan en un juez cuando se ven afectados en sus derechos o enfrentan un conflicto legal”, añadió.
De este modo, la gran incógnita es si los ciudadanos se sentirán motivados a elegir a sus futuros jueces y magistrados en las urnas, un proceso que podría resultar difícil de asimilar para quienes no están acostumbrados a este tipo de elecciones.
Fuente: Milenio