Internacional
China y Rusia abogan por un nuevo orden global multipolar en respuesta a lo que califican como comportamiento intimidatorio de países occidentales.
En la más reciente cumbre de la Organización de Cooperación de Shanghái (OCS) en Tianjin, los presidentes Xi Jinping y Vladimir Putin dirigieron fuertes críticas hacia Estados Unidos y Occidente, al acusarlos de mantener una “mentalidad de Guerra Fría” e intimidar a otros países. Xi destacó la necesidad de avanzar hacia un mundo multipolar fundado en instituciones como la ONU y la Organización Mundial del Comercio, mientras defendía la globalización inclusiva.
Putin, por su parte, responsabilizó a Occidente de desestabilizar Ucrania, y apuntó que el conflicto fue resultado de un golpe de Estado apoyado desde fuera y del expansionismo de la OTAN. En la misma línea, Xi abogó por una gobernanza mundial más justa y alejada de bloques de poder tradicionales.
La cumbre representa un punto clave en el impulso de un contrapeso global liderado por Eurasia, en contraste al dominio occidental, y coincide con un período de tensiones geopolíticas crecientes ante la creciente rivalidad entre potencias.
Fuente: The Guardian