México
La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) ha emitido una orden de suspensión sobre la resolución de 19 amparos presentados en contra de la Ley Minera y otras normativas que supervisan el uso del agua y la protección medioambiental para las empresas mineras. Esta medida se mantendrá en vigor hasta que el máximo tribunal determine si asume o no estos casos.
Esta acción fue motivada por la solicitud de la ministra Lenia Batres Guadarrama, quien instó a la SCJN a reconsiderar su competencia respecto a los litigios presentados por empresas mineras contra las reformas legales promulgadas el 8 de mayo de 2023. Dichas reformas tienen como objetivo salvaguardar los derechos a la vida, salud, agua y un entorno sano para las comunidades cercanas a las operaciones mineras.
La ministra presidenta, Norma Piña Hernández, ha firmado el acuerdo para dar trámite a la petición de reasunción de competencia 93/2024, lo que implica la suspensión de los juicios de amparo actualmente en curso en diversos tribunales colegiados, hasta que se resuelva la solicitud.
Por consiguiente, la SCJN ha solicitado a varios tribunales colegiados, incluyendo el de Durango, Jalisco y Morelos, donde se han tramitado los recursos de revisión, que detengan la emisión de resoluciones hasta que la Segunda Sala determine si avala la reasunción de competencia y decide atraer los casos.
La reforma a la Ley Minera contempla reducir de 50 a 30 años la duración de las concesiones, establecer la licitación como el único método para otorgarlas, exigir consultas previas con comunidades indígenas y "remunerarlas" con un cinco por ciento del proyecto, aumentar las sanciones y obligaciones ambientales, requerir concesiones especiales para el uso del agua y otorgar un trato preferencial a las entidades paraestatales.
Especialistas en la materia han señalado que los grandes consorcios mineros están buscando ampararse contra la Ley Minera para limitar las nuevas regulaciones y así mantener su actividad en el mercado de valores, basada en la especulación, especialmente con minerales estratégicos considerados indispensables a nivel internacional para la transición energética, como el litio, cobre y níquel.
Fuente: La Jornada